Fecundación en Vitro (FIV)

La fecundación in vitro, también llamada FIV, consiste en la fecundación de un óvulo por un espermatozoide para formar un embrión; permite reproducir en un laboratorio lo que ocurre de forma natural en las trompas de Falopio de la mujer.

La fecundación in vitro se realiza fuera del cuerpo de la mujer, in vitro, con la ayuda de una probeta, de ahí el nombre dado a estos bebés « los bebés probetas ».

Se realiza en probetas de material sintético, de un uso único, con medios de cultivo producidos y controlados por la industria farmacéutica y cuya composición es próxima al ambiente natural de las trompas.

Las probabilidades de éxito son variables y se sitúan en una media en torno al 30-40%.

RESULTADOS

Los factores más importante en el éxito de una FIV son: el primero la edad de la paciente, el segundo es el número de embriones transferidos.

La FIV alcanza entre el 30-40% de éxitos pero depende de la patología que tenga la paciente pues en patologías muy serias este porcentaje puede disminuir bastante, mientras que p.e. en causas tubáricas el éxito es mucho mayor.

Las estadísticas más favorables afirman que el 45% de las parejas terminan con un hijo en casa, siempre que cada pareja candidata acepte someterse a cinco transferencias de embriones.